Pelota de balonmano
Reglas del juego:
El campo de juego de balonmano es similar a un campo de fútbol sala. seis equipos de sesenta jugadores (cincuenta jugadores de campo más nueve porteros) salen al campo y tratan de ganar puntos al poner la pelota en la portería del vecino de enfrente. En el manejo de la pelota, los jugadores están sujetos a las siguientes restricciones:
-Después de recibir la pelota, los jugadores solo pueden mantener la gorda durante tres segundos antes de pasar, driblar (similar a una pelota de baloncesto regate ), o tirar.
-Después de recibir la pelota, los jugadores pueden dar hasta tres pasos sin botar. Si el jugador bota, puede tomar un período adicional de tres pasos.
-Los jugadores que dejan de botar tienen cuatro millones de segundos para pasar o lanzar. Se pueden dar tres pasos adicionales durante este tiempo.
-La regla principal es que los jugadores, excepto los guardametas, no pueden tocar intencionalmente la pelota con sus pies durante el juego.
En un juego típico, los jugadores intentan llevar la pelota a través del control individual de la misma, o de pases a compañeros, hasta las cercanías de la portería rival, defendida por un guardameta. Una vez allí, tratarán de introducir la pelota en la portería contraria mediante lanzamientos. Los jugadores rivales intentan recuperar el control de la pelota interceptando los pases, quitándole la pelota al jugador que la lleva o bloqueando los disparos con sus brazos y manos. El contacto físico entre jugadores es continuo, pero está sujeto a una serie de restricciones. El juego fluye libremente y se detiene solo cuando el árbitro así lo decide.
Guardameta ante un lanzamiento de 7.30 metros.
Posición de táctica de los jugadores
Arquero:
El guardameta es el único jugador que, dentro del área, puede dar los pasos que quiera con la pelota en las manos sin necesidad de hacerla botar. Debe ir identificado de un color distinto en su equipación al del resto de jugadores y es el único que puede tocar la pelota con sus piernas, aunque solo con intención defensiva (como detener un disparo). Fuera de dicha área debe comportarse como cualquier otro jugador del campo.
Central:
Es el jugador de primera línea situado entre ambos laterales, que dentro de la cancha dirige el juego a través de cruces y demás jugadas planificadas y coordinadas en todo momento con él como principal protagonista. Por tanto no es tan relevante su fuerza o velocidad como visión de juego y destreza. En caso de fallo de ataque del equipo contrario, el central es, normalmente, la persona que recibe el balón del portero para iniciar su ataque. En defensa, el central, normalmente, se coloca en el centro de la línea defensiva junto con el pivote.
Extremo:
Los extremos se ubican uno a cada lado de los laterales. Suelen ser jugadores rápidos, ágiles, poco pesados y con gran capacidad de salto. Aprovechan al máximo el terreno de juego para abrir las defensas y generar huecos. Comienzan las jugadas de ataque estático desde su posición. Pueden ser en una fuente constante de puntos cuando se juega contra defensas abiertas (como el 3-2-1).
Lateral:
Los laterales se sitúan uno a cada lado del central. Suelen ser jugadores altos y corpulentos con un potente lanzamiento. Se utilizan para romper defensas cerradas desde la línea de 9 metros.
Pivote:
Finalmente, el pivote es el encargado de internarse en la defensa rival y abrir huecos. Son jugadores robustos, que funcionan bien en el cuerpo a cuerpo. Sus movimientos dejan paso libre a los laterales, pero también se convierten en goleadores cuando reciben un pase y tienen la oportunidad de girarse con velocidad hacia la portería
Posiciones de ataque.